Ayer era la première de "50 sombras de Grey", es decir, que se estrenaba la película antes de que saliera en cines españoles. El caso es que recibí una invitación para poder acudir y me hizo mucha ilusión, ya que aunque no me había leído los libros, le habían dado tanto bombo a la peli que tenía curiosidad por verla.
Llegamos a Callao y allí estaba todo Madrid, no faltaba ni un alma en el preestreno y el montaje era increíble: un Charlie Tango en la puerta, un pianista, un photocall a la vista de todos...la cosa prometía!Y llegó el momento...
Como os decía, no me he leído los libros, pero por lo menos del primero llegué a la mitad. Con ese poquito que me había leído ya tenía grandes expectativas en la peli, pero algo no iba a salir bien cuando la peli la pueden ver mayores de 14 años. Para qué vamos a engañarnos, la película la puede ver un mayor de 14 años y un mayor de 5, porque la coca-cola light es menos light que la película.
1. Bragas de algodón: Los que me conocéis, ya sabéis mi cruzada contra las bragas de algodón, que no entiendo que no las hayan erradicado ya de la faz de la tierra. Aun así, yo entiendo que sean muy cómodas y que haya momentos en tu mes que necesites llevarlas, pero si has quedado con un maromo trajeado que se hace llamar Grey, lo último con lo que apareces es con unas bragas de algodón blanco de abuela. O sea, no se lo cree nadie, no me creo que exista hombre en la tierra que le pueda poner eso. Y como dice una chica de twitter, ya de las de Hello Kitty ni hablamos...
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2. Momento borro teléfono o llamo: Creo que esto es lo más real de la película, el único momento en el que me sentí identificada. Ese momento de la noche en la que el Gin Tonic ha sido tu compañero de viaje y no recuerdas bien si mañana era sábado o era domingo, y de repente coges el teléfono y marcas su número, y tu vida se debate entre borrar el contacto o llamarle por teléfono. Creo que debería existir una aplicación que te diera un calambrazo cada vez que vas a escribirle un mensaje o llamarle por teléfono, el que la invente se haría millonario. Yo por si las moscas, he borrado los teléfonos conflictivos para ahorrarme el mal trago.
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3. Momento me miras y se acaba el mundo: A ver, que no te digo yo que no. Que la chica tan modosita ella y va y se encuentra con ese cachondo y se le pone el mundo del revés. Pero, ese momento en el que él le roza por primera vez la cara con la MANO, y a ella se le ponen los ojos del revés y parece que ha tenido una maratón de llamémoslo amor del duro con Smith Jerrod, eso no hay quien se lo crea. Porque si se pone así con una mano en la cara, no me quiero imaginar cómo se pone con lo demás. Y diréis, pero si se verá en la peli...ERROR!!!La peli en las escenas subidas de tonos se cortaba más que la leche...
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4. Las escenas subidas de tono: No sé cómo definirlas, ¿cómo pueden hacer una película de sexo sin sexo? Un capítulo de los Teletubbies tiene más sexo que la película de 50 sombras de Grey, un Telediario tiene escenas más explicitas de sexo que 50 sombras de Grey, comerte un calippo de fresa te pone más cachondo que la película de 50 sombras de Grey, la canción de "Amo a Laura" tiene más carga erótica que 50 sombras de Grey, en los capítulos de Érase una vez el cuerpo humano se ve más carne que en la película de 50 sombras de Grey ...
Ya sé que en EE.UU son muy pudorosos, pero no nos vendáis la moto para luego traernos sólo el espejo retrovisor. Que de toda la vida de Dios, ha existido el porno fino o el porno elegante como dicen algunos y nadie se ha muerto.
Porque esto en mi opinión más que "50 sombras de Grey" parecía "50 sombras extra light sin cafeína de Grey". Vamos que si queremos ver algo que se asemeje al libro, habrá que esperar a que Erika Lust haga su versión. O esperar a que los Telettubies saquen nuevo capítulo, que para el caso, es lo mismo...
Total que nos pasamos la vida engañadas, primero de pequeñas nos dicen que busquemos un príncipe azul que nos trate como princesas y nos lleve a caballo y nos compre un castillo y ahora que llegamos a los 30, nos dicen que busquemos un rico guapo que les mole atarnos y nos pegue azotes. Mira tú, así no hay quién se aclare. Que no me he tirado yo 30 años buscando el "y fueron felices y comieron perdices" para que ahora me cambien el final del cuento...